Creo que bien se podría decir que el uso de una celebridad en los comerciales es como manejar un auto: si bien te puede llevar de un punto a otro, también puede ser un arma que uses en contra de alguien y/o de ti mismo.
Veamos estos tres comerciales, todos estuvieron al aire en el Súper Bowl XLV:
Teleflora – Help me Faith
Faith Hill es una cantante country en Estados Unidos; el punto aquí es que ella es completamente innecesaria para contar la historia, igualmente podrían haberse conseguido a una mujer igual de bonita que les habría costado una décima parte de lo que le pagaron a Hill… y el comercial sería el mismo. Una buena manera de desperdiciar el dinero de la marca… O de cumplir el sueño húmedo de un cliente enamorado de la celebridad.
Audi – Release the Hounds
Este me parece un buen ejemplo de cómo una celebridad (aunque en decadencia) puede darle un toque final supremo a un comercial ya de por sí bien realizado. El comercial tiene una buena idea creativa pero se apoya en la verdadera inclusión de Kenny G en el punchline, no sin antes darle una embarrada de antigüedad a la marca Mercedes Benz («era el que usaba mi papá»). Bien por Audi y sus creativos.
GoDaddy.com – New GoDaddy.CO girl
Esta marca comercializa dominios en internet, y aparentemente su frescura, irreverencia y humor apelan directamente a esos usuarios de 20 a 30 años que son emprendedores virtuales. El chiste es que acaba uno aceptando que le estuvo viendo los senos a Joan Rivers (de 77 años) durante todo el comercial… ¿Humor? Tal vez, pero me quedo con un sinsabor de si en realidad la marca fue entregada correctamente, o pesó más la celebridad que la marca y el mensaje a comunicar.
Si quieres ver todos los comerciales, hay un canal en YouTube (AdBlitz) que acostumbra subirlos y convoca a votar por el mejor, clic aquí.
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Todos somos consumidores 
A veces me parece que se gastan tanto presupuesto como pueden en un anuncio y la inversión aparentemente más segura es la de contratar una celebridad. Sin embargo, muchas veces recordamos el anuncio pero pasado el tiempo nos olvidamos o confundimos la marca que querían anunciar, independientemente del presupuesto que invirtieron. Ahora mismo hice el experimento tratando de recordar la marca de un shampoo de un anuncio donde Natalie Portman es protagonista. La primera marca que me vino a la cabeza fue Pantene…y me equivoqué, a pesar de recordar muchas imágenes del anuncio.
Lo mismo me ha pasado alguna otra vez con VW y Audi. No sé si esto sea intencionado o no pero sí es verdad que algunos anuncios llevan el sello de su marca tan claramente establecido que sería dificil de confundir.
Tienes toda la razón, y sobre el comercial de Natalie Portman, es más evidente por que en productos de cuidado personal es tiiiiipico que usen a una celebridad, pero ya cuando ponen el shot desde arriba con el pelo girando en espiral, ya valió y se convierte en uno del montón.
Buenísimo también el de Coca-Cola.
Gracias por escribir!!!